ORIGINAL: El Colombiano
POR DIEGO AGUDELO GÓMEZ
6 de julio de 2013
Una plataforma en internet invita a sus usuarios a pensar fuera del molde a la hora de imaginar aplicaciones prácticas para las patentes que acumulan polvo en universidades y compañías de base tecnológica.
Entre las miles de patentes registradas cada año por universidades y compañías, existen algunas que se envejecen en los archivos sin aplicaciones reales. Invenciones o descubrimientos en etapas crudas que podrían tener un impacto importante en las personas pero que se olvidan por falta de alternativas ingeniosas y viables para usarlos.
Este es el problema que la plataforma Marblar busca solucionar convocando a cientos de usuarios a participar en lluvias de ideas que busquen modos de aplicar esas tecnologías.
La visión de Superman, un transformer acuático, hogares que optimizan su consumo de energía, un detector de células muertas, rayos láser para crear esculturas microscópicas o una enzima para aumentar la resistencia de los huesos son algunas de las patentes en las que los usuarios pueden participar proponiendo maneras ingeniosas de uso.
El sistema de Marblar es abrir un foro en el que cada participante registra propuestas para cada patente, creando una competencia en la que se pueden ganar puntos a medida que se aportan soluciones o dinero si la idea propuesta resulta ganadora. Puede participar cualquier persona pero el perfil de los usuarios más activos y exitosos suele ser especializado: científicos, inventores, ingenieros que ponen a prueba su intelecto y de paso obtienen algo a cambio como si fueran unos cazarrecompensas de la ciencia.
La plataforma, creada por una compañía inglesa de gestión de la propiedad intelectual, permite además que universidades, entidades sin ánimo de lucro o inventores independientes suban sus proyectos en busca de esa retroalimentación colectiva.
El creador de Marblar, Dan Perez, PhD de la Universidad de Oxford, la concibió como una estrategia simple de "gamificar" la ciencia y la tecnología para encontrarles aplicaciones comerciales viables, acortar el camino entre los investigadores y la gente. "Es una pena que más del 90 % de las innovaciones se queden en un estante acumulando polvo porque el camino al mercado no es obvio", dice.
POR DIEGO AGUDELO GÓMEZ
6 de julio de 2013
Una plataforma en internet invita a sus usuarios a pensar fuera del molde a la hora de imaginar aplicaciones prácticas para las patentes que acumulan polvo en universidades y compañías de base tecnológica.
Entre las miles de patentes registradas cada año por universidades y compañías, existen algunas que se envejecen en los archivos sin aplicaciones reales. Invenciones o descubrimientos en etapas crudas que podrían tener un impacto importante en las personas pero que se olvidan por falta de alternativas ingeniosas y viables para usarlos.
Este es el problema que la plataforma Marblar busca solucionar convocando a cientos de usuarios a participar en lluvias de ideas que busquen modos de aplicar esas tecnologías.
La visión de Superman, un transformer acuático, hogares que optimizan su consumo de energía, un detector de células muertas, rayos láser para crear esculturas microscópicas o una enzima para aumentar la resistencia de los huesos son algunas de las patentes en las que los usuarios pueden participar proponiendo maneras ingeniosas de uso.
El sistema de Marblar es abrir un foro en el que cada participante registra propuestas para cada patente, creando una competencia en la que se pueden ganar puntos a medida que se aportan soluciones o dinero si la idea propuesta resulta ganadora. Puede participar cualquier persona pero el perfil de los usuarios más activos y exitosos suele ser especializado: científicos, inventores, ingenieros que ponen a prueba su intelecto y de paso obtienen algo a cambio como si fueran unos cazarrecompensas de la ciencia.
La plataforma, creada por una compañía inglesa de gestión de la propiedad intelectual, permite además que universidades, entidades sin ánimo de lucro o inventores independientes suban sus proyectos en busca de esa retroalimentación colectiva.
El creador de Marblar, Dan Perez, PhD de la Universidad de Oxford, la concibió como una estrategia simple de "gamificar" la ciencia y la tecnología para encontrarles aplicaciones comerciales viables, acortar el camino entre los investigadores y la gente. "Es una pena que más del 90 % de las innovaciones se queden en un estante acumulando polvo porque el camino al mercado no es obvio", dice.
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